Fritz Rahmann
Naturaleza de las imágenes, reportaje del 5 al 28 de febrero de 1991, 1991

Artista
Fritz Rahmann

Título
Naturaleza de las Imágenes, reportaje del 5 al 28 de febrero de 1991

Año de creación
1991

Técnica y dimensiones
técnica mixta que incluye 2.250 fotografías, 150 x 100 cm.

Año de adquisición
2006

Adquisición de la fundación

El detonante de la obra La naturaleza de las imágenes de Fritz Rahmann. Para el artista, el reportaje era una escena del informativo de la noche. El Ministro de Asuntos Exteriores alemán, tropezando entre los escombros en Tel Aviv y sin poder hacer comentarios, pareció demostrarle a Rahmann que, después de todo, la televisión puede transmitir hechos repentinos que van más allá de lo que se pretendía mostrar. Por un momento la escena reveló más de lo que cabría esperar. Escenas similares también aparecen en la obra “La naturaleza de las imágenes. Reportaje”, presentada en cinco ciudades asiáticas por invitación del Instituto Goethe. Estos quedan plasmados en fotografías y suelen estar representados por diferentes rostros de personas repartidas por la habitación. Las obras de Rahmann son en su mayoría obras temporales en espacios públicos; permiten que el arte tenga lugar en lugares donde no puede comercializarse, lo que sitúa el papel del artista en una nueva perspectiva.

Esta visión sociopolítica del grupo Büro Berlin, que Rahmann desarrolló junto con Raimund Kummer y Herrmann Pitz, deja claro que cada lugar puede ser un espacio para el arte, con el que intentaron hacer lo que muchos artistas jóvenes pusieron en práctica en el La década de 1990 se convirtió. La penetración del arte en el espacio público y la separación de museos y galerías se basa en la cuestión del concepto de arte, que está cambiando de una obra tradicional a una visión de procesos. Rahmann combina la acción táctil con el compromiso teórico, deja que el arte llegue al espacio, cuestiona la forma y la tarea del artista en la sociedad y lo hace con obras menos provocativas que sus colegas, que sin embargo, o quizás por eso, estimulan el pensamiento.